martes, 16 de octubre de 2018

Qué ha sido de mí

Hola chicas. Chicas porque la mayoría de las personas que comentábais lo érais, no por otra cosa.

Hace algo más de un año dejé una entrada en la que os informaba de por qué había dejado de subir capítulos, de por qué había dejado abandonado esto y de por qué había dejado de escribir en general. No lo he releído desde entonces, pero sé que no voy a estar de acuerdo con la mitad de las cosas que dije entonces.

Una de ellas tenía que ver con lo orgullosa que estaba de estudiar un Grado Superior, cosa de la que no me arrepiento, pero de la que ya no siento tanto orgullo. No es que sea algo malo el hecho de tener esta clase de estudios, sino que en mi caso me ha hecho ver que ese no era mi camino. Tristemente, esta sociedad sigue teniendo una mentalidad lineal y progresiva, que no progresista, con el que lo máximo a lo que puedes llegar en tu vida estudiantil es una carrera universitaria. Después del grado, ese camino era el que me tocaba coger, y no por gusto, ni por voluntad propia ni mucho menos.

Muchas veces vemos en las películas cómo un/x joven con un futuro prometedor como pintor/x o bailarín/x se ve obligado por sus padres y hasta compañeros a estudiar  para ser médico o abogado, algo que "realmente valga la pena". No es exactamente mi caso, ya que yo no es que quisiera estudiar algo distinto, es que no quería estudiar nada y me he visto obligada a escoger una carrera para así no tener que aguantar quejas, "consejos" y "ayuda", además de preguntas constantes sobre qué estoy estudiando, por qué no estoy estudiando y qué pretendo hacer en la vida sin estudios universitarios.

He escogido una fácil (y no científica) que pueda sacar, para que así al menos entienda alguna de las asignaturas y pueda terminar con esto cuanto antes. Pero sinceramente, después de un mes sólo siento que es cuesta arriba.

Sé que no os importa y que apenas van a leer esto un par de personas, si es que llega a leerlo alguien, pero este es el único sitio que me queda oara desahogarme sin que personas cercanas a mí piensen que soy una exagerada o sientan lástima por mí.

Además, os echo de menos. Echo de menos esto, escribir aquí, leer vuestros comentarios, contestaros y pensar en el siguiente capítulo.

Antes pensaba que mi vida era un horror por tener que estudiar matemáticas e Historia, asignaturas que se me daban (y se me dan) de pena. Asignaturas que no entendía ni quería entender y que, por tanto, me daban horas y horas de libertad mental en la que escribir toda esta tonta historia. Ahora sé que mi vida es un horror porque no tengo tiempo de pensar en algo que no esté estipulado.

Me gustaría poder volver atrás y de nuevo tener asignaturas en las que pensar qué hacer con uno u otro personaje, qué hacer para que os sorprendais, qué comentarios vais a dejarme y qué ideas vosotros mismos me vais a dar. Echo tanto de menos eso.

Ahora también me doy cuenta de que por un breve momento, tuve una pequeña fama que a muchos influencers ahora mismo no les valdría para nada, ¿pero para mí? Para mí fue lo máximo que podía pedir. Tener un blog en el que escribir todos los días y conseguir más de 80 mil visitas es algo grandioso, o al menos para mí lo es, y es algo que podría haber llegado a más, si hubiera sabido como.

Tristemente no puedo cambiar eso, pero no puedo evitar arrepentirme de no haberlo hecho bien en Wattpad, haber conseguido una editorial y haber metido un braguetazo editorial a lo Anna Todd. No me estoy comparando con ella, ni mucho menos estoy comparando nuestras historias, Dios me salve de pensar algo así, pero creo que podría haberlo hecho un poco mejor entonces y con ello que ahora estuviera bastante mejor.

Otra de las cosas que creo recordar que dije en la última entrada fue que en algún momento seguiría con esta fic, no por aquí y no dentro de poco. Eso sí que lo he intentado cumplir, pero no con la perspectiva adecuada. Mi idea principal era coger entrada por entrada tanto este blog como el anterior (la primera parte) y ponerlos en un Word, para ponerme a corregir y pum, tendría no sé cuantísimos libros, ya que de todo esto no se saca ni un libro ni dos, ya os lo aviso. Obviamente eso de coger todo y convertirlo en un libro de la noche a la malana no ha sido viable, pero creo que ya he dado con la forma de hacerlo.

Eso no significa que esto vaya a ser mi próximo proyecto.

Ahora mismo tengo dos proyectos en proceso. Uno de ellos está terminado y estoy tratando de corregirlo para así poder enviarlo a alguna editorial, aunque dudo que nadie lo quiera. Otro de ellos es la segunda parte de este primer proyecto. Además, hay una tercera parte de este proyecto que apenas está pensada, pero que ojalá pueda llevar a cabo, aunque lo veo difícil.

Si veo que nada de eso me funciona, podré centrarme en rehacer esta historia, aunque claro, prefiero la idea de tener al menos un libro publicado, uno de verdad que esté en librerías y plataformas y que vosotros podáis leer en vuestras casa, al igual que leíais todo esto.

Pero está claro que esto, estos dos párrafos que acabo de escribir, son sólo sueños imposibles con pocas esperanzas de ser cumplidos. Y no es porque quiera ser negativa, sino porque hay que volver a los primeros párrafos para darse cuenta de que ya no tengo tiempo, ni un entorno que me estimule o haga salir a flote la poca creatividad que me queda.

Creo que voy a tomar como costumbre escribir al menos una entrada al año, para poneros al día, para intentar contactar con alguna de vosotras de nuevo, ya que eso me alegraría bastante el día. No es por hacer spam, pero sigo teniendo una cuenta bookstagram con la que podéis contactar conmigo, no subo muy buenas fotos y tampoco mejores reseñas, pero al menos me saca un poco de la montonía. La cuenta es @littleflowersbooks.

Espero poder traeros una entrada más alegre el año que viene y esperanzadora el año que viene.

Os sigo queriendo y echando de menos.

Ane.